De cualquier lugar.

Pudo haber sido ayer, pudo haber sido antes-de-ayer, en Berlin, en Paris, en Tokio. Por los campos, en medio de la ciudad, alrededor de una casa, en la manzana que daba justo a la tintoreria del centro, mientras los fideos se cocinaban.
Todas las cosas pueden suceder en todos lados. La verdad es que es verdad. Se muere y se nace constantemente, alrededor del globo. Nuestras posibilidades son infinitas, a veces dependen de nosotros y a veces no. Tan incierto y tan predecible como la poesía, como las corrientes del rio, como los dialogos de oficina...
Sin embargo, Buenos Aires se encuentra inundada de emociones todos los dias. Uno puede pensar que pasa en todos lados. La vida se alienta y se renueva. Muchos que no hacen nada y pocos que hacen algo pero el contexto da, ¿Cómo en pocos años pasamos a recuperar la esperanza, a ser tierra de oportunidades? Será por mi edad, la de querer vivir todas las vidas. Los llamados, el punto justo. ¿Qué mas nos falta para arrancar?
Estas cosas filosóficas, dichas asi nomas, pasan por mi cabeza. Y pasan por la cabeza de muchos la verdad, porque no es nada diferente. Más en domingo, donde nos encontramos un poco mas. Los deberes callan por momentos. Lo mas curioso es que todos dicen que es el día mas aburrido. Hay que analizarlo. Yo por lo pronto reniego de algunos idealismos, emprendo otras busquedas. Hay que poder coincidir las cosas. Que a veces entran y otras no.

(Esta nota se encuentra llena de palabras como quizás, tal vez, puede ser que si, o que no. La verdad es que como estas palabras, nada se encuentra escrito. Todo se encuentra por escribir. Absolutamente. Nos faltará plata pero no hace falta.)

Y asi de una tirada aprieto enter. Despues va a haber tiempo de corregir, de cambiar, de transformar y terminar creando otras cosas. Muchas veces sirve el punto de partida. Para empezar.